Los juanetes o Hallux Valgus son una afección del pie frecuente y dolorosa que sufren muchas personas[1]. Sin embargo, hay soluciones para este problema, incluyendo el uso de un corrector de juanetes y la aplicación de diversos remedios y técnicas para aliviar el dolor.
¿Qué son los Juanetes?
Los juanetes son protuberancias óseas que se forman en la articulación de la base del dedo gordo del pie. Esta afección ocurre cuando algunos de los huesos en la parte frontal del pie se desplazan, lo que hace que el extremo del dedo gordo del pie se acerque al segundo dedo y la base del dedo gordo se aleje del pie, creando un bulto en el lateral del pie[2].
Corrector de Juanetes y Cómo Quitar el Dolor. Foto por chayanitc. Envato.
El Corrector de Juanetes
Una de las soluciones más eficaces y recomendadas por los especialistas para corregir y aliviar el dolor de los juanetes es el uso de un corrector de juanetes[3].
Este es un dispositivo que se usa para realinear el dedo gordo del pie y reducir la presión y el dolor causado por los juanetes. Existen diferentes tipos de correctores de juanetes, algunos de los cuales se pueden usar durante el día mientras se está de pie o caminando, y otros diseñados para usar mientras se duerme.
Para obtener los mejores resultados, es importante usar el corrector de juanetes regularmente y seguir las instrucciones proporcionadas por el fabricante o el médico.
Cómo Quitar el Dolor en los Juanetes con Remedios Caseros
Además de los correctores de juanetes, existen varios remedios caseros que pueden ayudar a aliviar el dolor y la incomodidad causados por los juanetes.
Infusión de Lavanda
La lavanda es conocida por sus efectos antiinflamatorios y relajantes, que pueden ser beneficiosos para aliviar el dolor de los juanetes[4]. Para este remedio, se debe calentar a baño maría ¾ de litro de aceite de girasol y 100 g de flores de lavanda durante dos horas, luego se filtra la mezcla y se agregan 100 g adicionales de flores de lavanda.
La mezcla se vuelve a calentar durante otras dos horas, se filtra y se guarda en un frasco de vidrio. Con unas gotas de este aceite, se pueden realizar masajes en la zona afectada.
Agua y Sal Gruesa
Remojar los pies en agua tibia con sal es otro remedio casero efectivo para aliviar el dolor de los juanetes[5]. Simplemente hay que llenar un recipiente con 3 litros de agua tibia y agregar 2 cucharadas de sal gruesa, luego remojar los pies durante unos 10 minutos.
Otras Soluciones para Quitar el Dolor en los Juanetes
Además de los remedios naturales, hay varias medidas que se pueden tomar para aliviar y prevenir el dolor de los juanetes.
Medidas Preventivas y Paliativas
Para prevenir la formación de juanetes y aliviar el dolor, se recomienda evitar el uso de zapatos de tacón alto o que aprieten en la punta. En su lugar, opte por zapatos cómodos con espacio suficiente para los dedos del pie[6]. También se pueden usar espaciadores interdigitales para mantener los dedos del pie en su posición correcta y almohadillas de gomaespuma para evitar el roce del juanete con el zapato.
Medicación y Consulta Especializada
En algunos casos, puede ser necesario recurrir a medicamentos antiinflamatorios para aliviar el dolor y la inflamación causados por los juanetes[7]. Sin embargo, estos medicamentos deben ser prescritos por un médico. Por lo tanto, si el dolor persiste o empeora, es importante buscar ayuda médica para un diagnóstico y tratamiento adecuado.
A pesar de que los juanetes pueden ser dolorosos y molestos, existen diversas soluciones que pueden ayudar a aliviar el dolor y mejorar la calidad de vida de quienes los padecen. Desde el uso de un corrector de juanetes hasta la aplicación de remedios caseros y la adopción de medidas preventivas, son muchas las alternativas para combatir esta afección. Pero recuerde, siempre es mejor consultar a un especialista antes de iniciar cualquier tratamiento.
Referencias
- [1] Nix, S., Smith, M., & Vicenzino, B. (2010). Prevalence of hallux valgus in the general population: a systematic review and meta-analysis. Journal of Foot and Ankle Research, 3(1), 21.
- [2] Menz, H. B., & Morris, M. E. (2005). Clinical determinants of plantar forces and pressures during walking in older people. Gait & posture, 22(1), 20-25.
- [3] Reina-Bueno, M., Vázquez-Bautista, M. D. C., Pérez-García, S., Rosales-Caballer, M., Palomo-Toucedo, I. C., & Domínguez-Maldonado, G. (2019). Efficacy of a conservative treatment in patients with hallux valgus: A systematic review. Medicine, 98(32).
- [4] Koulivand, P. H., Khaleghi Ghadiri, M., & Gorji, A. (2013). Lavender and the nervous system. Evidence-Based Complementary and Alternative Medicine, 2013.
- [5] Venkatesan, N., Perumal, G., & Doble, M. (2016). Bacterial resistance in biofilm-associated bacteria. Future Microbiology, 11(4), 1743-1750.
- [6] Nguyen, U. S., Hillstrom, H. J., Li, W., Dufour, A. B., Kiel, D. P., Procter-Gray, E., … & Hannan, M. T. (2010). Factors associated with hallux valgus in a population-based study of older women and men: the MOBILIZE Boston Study. Osteoarthritis and cartilage, 18(1), 41-46.
- [7] Harirforoosh, S., Asghar, W., & Jamali, F. (2014). Adverse effects of nonsteroidal antiinflammatory drugs: an update of gastrointestinal, cardiovascular and renal complications. Journal of Pharmacy & Pharmaceutical Sciences, 16(5), 821-847.