La bilirrubina es un pigmento de color amarillo que se produce en el hígado a partir de la descomposición de los glóbulos rojos viejos(1). Se puede medir a través de un análisis de sangre y se presenta en dos formas en el cuerpo humano: bilirrubina directa y bilirrubina indirecta. Cuando estos niveles están por encima de lo normal, bilirrubina alta, puede ser un signo de una serie de trastornos de salud que pueden variar desde condiciones menores hasta enfermedades más graves(2). A continuación, vamos a explorar en detalle qué puede causar un aumento de la bilirrubina y cómo se maneja clínicamente.
Niveles Normales de Bilirrubina
Para entender si los niveles de bilirrubina son altos, necesitamos entender primero qué se considera normal. Los rangos son generalmente los siguientes:
Bilirrubina alta, causas y forma de controlarla. Foto por Doğukan Şahin. Unsplash.
- Bilirrubina directa: entre 0 y 3 mg/dl.
- Bilirrubina indirecta: menos de 1.0 mg/dl.
- Bilirrubina total: entre 0.3 y 1.9 mg/dl(3).
Cualquier nivel que exceda estos rangos podría ser un indicador de hiperbilirrubinemia(4).
Causas de la Bilirrubina Alta
Un incremento de la bilirrubina en la sangre puede ser un signo de problemas de salud variados. Algunos pueden ser menores y temporales, mientras que otros pueden ser más graves y duraderos.
Hepatitis
Este es un término general que se refiere a la inflamación del hígado. La hepatitis puede ser causada por una infección viral, consumo excesivo de alcohol, una reacción autoinmune, o una reacción adversa a ciertos medicamentos(5). La hepatitis puede afectar la capacidad del hígado para procesar y excretar la bilirrubina, lo que puede resultar en niveles elevados.
Obstrucción de las Vías Biliares
Las vías biliares son pequeños tubos que transportan la bilis del hígado a la vesícula biliar y al intestino delgado(6). Si estas vías se bloquean, la bilirrubina puede acumularse en la sangre. Las piedras en la vesícula biliar y los tumores en el páncreas son causas comunes de la obstrucción de las vías biliares(7).
Cirrosis Hepática
La cirrosis hepática es una condición crónica y grave en la que el tejido del hígado se daña y se reemplaza por tejido cicatricial(8). Puede afectar la capacidad del hígado para procesar la bilirrubina, lo que puede resultar en niveles elevados.
Anemia Hemolítica
En esta condición, los glóbulos rojos se destruyen más rápido de lo que pueden ser reemplazados(9). Como resultado, la producción de bilirrubina puede aumentar, lo que puede llevar a un aumento de la bilirrubina en la sangre.
Síndrome de Gilbert y Otras Enfermedades Genéticas
Estas son condiciones hereditarias que afectan la forma en que el hígado procesa la bilirrubina(10). Aunque generalmente son inofensivas, pueden llevar a niveles elevados de bilirrubina.
Siempre es importante consultar a un profesional de la salud cuando se detectan niveles elevados de bilirrubina para obtener un diagnóstico adecuado y un plan de tratamiento personalizado.
Cómo Controlar la Bilirrubina Alta
El tratamiento para controlar los niveles de bilirrubina se centrará en la causa subyacente del aumento de la bilirrubina(11). Aquí hay algunas posibles formas de manejar y controlar los niveles elevados de bilirrubina:
Tratamiento de la Causa Subyacente
Como hemos mencionado anteriormente, un aumento en los niveles de bilirrubina es a menudo un síntoma de un problema de salud subyacente. Por lo tanto, el primer paso para controlar la bilirrubina alta es tratar la afección que la está causando, ya sea hepatitis, cirrosis, anemia hemolítica, una obstrucción de las vías biliares o una enfermedad genética(12).
Mantener un Estilo de Vida Saludable
Un estilo de vida saludable es clave para mantener el buen funcionamiento del hígado. Esto incluye una dieta balanceada, mantenerse hidratado, hacer ejercicio regularmente, limitar el consumo de alcohol y evitar medicamentos que pueden dañar el hígado(13).
Consultar Regularmente a un Médico
El monitoreo regular de los niveles de bilirrubina puede ser crucial para prevenir complicaciones graves(14). También es esencial seguir todas las recomendaciones de su médico y tomar todos los medicamentos según las instrucciones.
Aunque algunos remedios caseros y suplementos pueden promocionarse para el manejo de la bilirrubina alta, siempre es esencial discutir estas opciones con un profesional de la salud antes de empezar cualquier régimen de tratamiento.
Referencias:
- Vítek, L., & Ostrow, J. D. (2019). Bilirrubina: un pigmento amarillo con un propósito. Fisiología humana.
- Bos, E. M., Van Goor, H., Joles, J. A., Whiteman, M., & Leuvenink, H. G. (2013). Bilirrubina: marcador y modificador de enfermedades renales. Journal of Kidney International.
- Sherwood, L. (2020). Fisiología humana: desde células a sistemas. Cengage.
- Van Beers, E. J., Van Wijk, R. (2018). Síndromes de hiperbilirrubinemia: una actualización de la clasificación molecular y una revisión de los aspectos clínicos. American Journal of Hematology.
- European Association for the Study of the Liver. (2017). EASL 2017 Clinical Practice Guidelines on the management of hepatitis B virus infection. Journal of Hepatology.
- Chowdhury, R., & Bhowmik, D. (2019). Vías biliares. En StatPearls [Internet]. StatPearls Publishing.
- Warttig, S., Ward, S., Rogers, G.; Guideline Development Group. (2012). Diagnosis and management of gallstone disease: summary of NICE guidance. BMJ: British Medical Journal.
- Wells, R. G. (2014). Fisiopatología de la cirrosis hepática. En Portal Hypertension V. Springer.
- Heeney, M. M., & Ware, R. E. (2018). Fisiopatología y tratamiento de la anemia hemolítica. Anales de medicina interna.
- Kaplan, M., & Hammerman, C. (2017). Patogénesis, diagnóstico y manejo del síndrome de Gilbert. Journal of Pediatric Gastroenterology and Nutrition.
- McPherson, R. A., & Pincus, M. R. (2017). Examen y diagnóstico en medicina de laboratorio clínico. Elsevier.
- Ibid.
- Zelber-Sagi, S., Salomone, F., & Mlynarsky, L. (2017). The Mediterranean dietary pattern as the diet of choice for non-alcoholic fatty liver disease: Evidence and plausible mechanisms. Liver International.
- McPherson, R. A., & Pincus, M. R. (2017). Examen y diagnóstico en medicina de laboratorio clínico. Elsevier.