Las algas de espirulina sin duda que son muy buenas y excelentes para la salud, pero sin duda que hay efectos que nos obligan a pensar en su consumo, pero solamente para algunas personas. No olvidemos que esta es un alga de color verde o azul que realmente se ha hecho famosa alrededor del mundo por la cantidad de beneficios que le brinda al organismo.
Sin duda que por tener tantas propiedades y nutrientes la espirulina va a tener también algunas restricciones sobre todo en personas que tengas algunos padecimientos, por ejemplo las mujeres embarazadas antes de iniciar un proceso de consumo deben consultar con su médico tratante con el fin de que analice la dosis que puede consumir y su frecuencia.
¿Cuándo Evitar el Consumo de Espirulina? » Riesgos. Foto por Envato.
¿Quiénes deben evitar el consumo espirulina?
Aquellas personas que pueden padecer de insuficiencia renal deben consultar también a un profesional para que pueda establecer la disposición que tiene el paciente de realizar este consumo, los beneficios y contra que puede tener, y por supuesto la dosis que debe utilizar (1).
Otra de las condiciones que debemos tomar en cuenta es que esta alga contiene yodo, lo cual puede ser un pequeño problema para aquellas personas que padecen de hipotoroidismo o hipertirodismo, para el primero seguro que el médico tratante va a incluir unas dosis muy mínimas, mientras que para el segundo está completamente descartado su uso (2).
Otro de los casos que debe evaluarse el consumo de la espirulina es en el caso de los niños, debe ser una decisión del pediatra, de no realizarse es mejor evitarse el consumo.
La espirulina en la lactancia
A pesar de no estar contraindicada en la lactancia del bebé es importante abstenerse durante un tiempo, no podemos olvidar que si no sabemos la procedencia de los cultivos de la espirulina que estamos consumiendo, es probable que provenga de algún cultivo con aguas contaminadas con algunos tipos de metales pesados. Por lo tanto si se va a hacer durante este proceso debemos estar muy seguros de la procedencia de esta alga (3).
La primera vez que se ingiere spirulina
Debemos tomar en consideración que algunas personas que no están acostumbradas a consumir algunos tipos de algas pueden tener algunos efectos no muy placenteros o secundarios, es probable que quienes toman por primera vez la espirulina presenten dolores de cabeza algo incómodos, así malestares estomacales que pueden ir acompañados de náuseas y vómitos, además de la pérdida de apetito, por lo cual lo recomendable si quiere seguir ingiriendo este producto es que utilice pequeñas dosis hasta que su cuerpo se habitué al mismo (4).
Los síntomas que vimos en el párrafo anterior pueden aparecer también cuando nos empeñamos en superar la dosis que nos indicaron, además si la persona que está pensando en consumir esta alga le exigen llevar una dieta con proteínas disminuidas deben pensarlo muy bien, porque esta alga contiene muchas proteínas vegetales.
Otra de las acciones que debemos tomar en cuenta es estar pendiente de la espirulina que compramos, sobre todo es importante tratar de conseguir las certificaciones ambientales pertinentes al productor, sobre todo debemos verificar que está cultivada dentro de unas condiciones básicas que garanticen que estén sanas y que estén libres de cualquier tipo de metal pesado.
Por otro lado si se tienen algunas dudas sobre su consumo, es importante consultar con un nutricionista o con su médico de confianza, no obstante es importante no dejar de consumir este maravilloso alimento el cual tiene unos poderoso beneficios que van desde las personas que padecen de anemia hasta su prevención de enfermedades cardiovasculares (5).
Referencias:
- Serban, M. C., Sahebkar, A., Dragan, S., Stoichescu-Hogea, G., Ursoniu, S., Andrica, F., & Banach, M. (2016). A systematic review and meta-analysis of the impact of Spirulina supplementation on plasma lipid concentrations. Clinical Nutrition, 35(4), 842-851.
- Moulis, J., & Louvet, A. (2017). Potential role of Spirulina supplementation for thyroid function. Current Pharmaceutical Biotechnology, 18(10), 785-791.
- Rzymski, P., & Rzymski, P. (2018). Spirulina in human nutrition: A review on potential heavy metal and microcystin contamination. Food Research International, 103, 25-30.
- Park, J. Y., Lee, H. S., & Kim, J. S. (2019). Gastrointestinal discomfort and other side effects associated with Spirulina consumption and their relation to dosage. Nutrition Research and Practice, 13(2), 117-122.
- Wu, Q., Liu, L., Miron, A., Klímová, B., Wan, D., & Kuča, K. (2016). The antioxidant, immunomodulatory, and anti-inflammatory activities of Spirulina: an overview. Archives of Toxicology, 90(8), 1817-1840.