EQUINÁCEA » Propiedades, Beneficios y Riesgos de su Consumo

Redacción

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La equinácea es una planta reconocida por su capacidad para fortalecer el sistema inmune. Se ha utilizado tradicionalmente en el tratamiento de resfriados y gripes, debido a sus propiedades antiinflamatorias y antivirales.

Equinácea. Foto por Envato.

La equinácea es reconocida por sus propiedades que refuerzan el sistema inmunológico, lo cual la convierte en una aliada para la prevención y tratamiento de diversas afecciones, como la fiebre y los resfriados (1). Este artículo busca verificar y enriquecer la información sobre la equinácea con datos y estudios científicos pertinentes.

¿Qué es la equinácea?

La equinácea, también conocida como Echinacea, es una hierba nativa de América del Norte que ha sido utilizada tradicionalmente por los indígenas americanos en su medicina tradicional desde el siglo XX. Se caracteriza por su apariencia similar a la margarita y es posible su cultivo en jardines domésticos fuera de su hábitat natural (2).

Equinácea. Foto por Envato.

Actualmente, se conocen 23 especies de equinácea, pero solo tres de ellas (Echinacea pallida, Echinacea angustifolia y Echinacea purpurea) son las más utilizadas en la suplementación humana por sus efectos beneficiosos comprobados.

Componentes de la equinácea

Entre sus componentes más destacados se encuentran los ácidos fenólicos, polisacáridos, aceites esenciales y alquilamidas. Las alquilamidas en particular juegan un papel fundamental en la mejora del sistema inmunológico (3). Además, el valor medicinal de la equinácea se ve potenciado por su contenido en vitaminas y minerales.

Cultivo de equinácea

El cultivo de equinácea prospera mejor en climas soleados y cálidos, y su floración se extiende durante el verano. Prefiere suelos arcillosos y bien drenados y requiere cierto grado de humedad para su óptimo desarrollo (4).

Propiedades de la equinácea

Esta planta destaca por su efectividad en trastornos respiratorios y su influencia positiva en el sistema inmune. La equinácea es un potente antimicrobiano, proporcionando una opción natural frente a los antibióticos sintéticos para combatir bacterias y hongos (5).

Los compuestos como la equinacina, el ácido chicórico y el ácido cafeico fortalecen el sistema inmune al estimular la producción de glóbulos blancos (6). Además, sus propiedades cicatrizantes la hacen ideal para el tratamiento tópico de heridas y otras afecciones cutáneas, apoyando la capacidad del sistema inmune para reparar tejidos (7).

Valor nutricional de la equinácea

Nutrientes y minerales por cada 100 gramos
Calorías320 kcal
Proteínas21,2 g
Carbohidratos54,2 g
Grasas2,1 g
Vitamina C20 mg

Beneficios de la equinácea

Beneficios de la Equinácea. Foto por Envato.
Beneficios de la Equinácea. Foto por Envato.

Los beneficios de la equinácea trascienden su conocido impacto en el sistema inmunológico. A continuación, se detallan y verifican algunos de estos beneficios con estudios científicos relevantes:

Efecto antiarrugas: Los taninos presentes en la equinácea son conocidos por sus propiedades antioxidantes, los cuales ayudan a neutralizar los radicales libres y podrían contribuir al retraso del envejecimiento de la piel, incluyendo la reducción de arrugas. Esto se debe a la presencia de compuestos fenólicos que tienen un potencial antioxidante significativo (8).

Previene la caída del cabello: El incremento de la circulación sanguínea en el cuero cabelludo, debido a los extractos de equinácea, podría revitalizar los folículos pilosos y reducir la caída del cabello, aunque la investigación específica sobre este efecto es limitada (9).

Disminuye el acné: La aplicación tópica del zumo de equinácea podría beneficiar la recuperación de la piel en casos de heridas, picaduras y acné, gracias a sus propiedades antimicrobianas y antiinflamatorias (10).

Suplemento vitamínico: La equinácea contiene vitaminas A, C y E, así como minerales como hierro y cobre, lo que la hace un complemento nutricional valioso (11).

Alivia los síntomas de problemas respiratorios: Es bien reconocido el uso de la equinácea en el alivio de síntomas relacionados con problemas respiratorios, incluyendo resfriados, gripes y alergias. Estudios han demostrado su poder antiinflamatorio en tales condiciones (12).

Efecto laxante: El té de equinácea puede actuar como un laxante suave, facilitando la función gastrointestinal, aunque es necesario moderar su consumo y consultar a un profesional de la salud ante su uso prolongado (13).

Actúa como analgésico: La equinácea ha mostrado tener propiedades analgésicas, siendo útil en el alivio del dolor de diferentes tipos (14).

Ideal para las estaciones: Por su efecto inmunomodulador, la equinácea puede ayudar a proteger las vías respiratorias durante los cambios de estación, aunque es importante un uso adecuado y no exceder en su consumo (15).

En cuanto al uso de la equinácea, se puede consumir como o utilizar tópicamente en forma de ungüento para diversas afecciones. Sin embargo, es fundamental que su uso sea supervisado por un profesional de la salud para evitar contraindicaciones o interacciones con otros medicamentos.

Contraindicaciones

Contraindicaciones de la Equinácea. Foto por Envato.
Contraindicaciones de la Equinácea. Foto por Envato.

El Comité Europeo de Hierbas Medicinales ha reconocido múltiples beneficios de la equinácea, pero también ha indicado importantes contraindicaciones. Se debe evitar el consumo de equinácea en mujeres embarazadas o en periodo de lactancia, así como en personas con enfermedades autoinmunes como la esclerosis múltiple, artritis reumatoide y lupus, debido al potencial de la planta para estimular la actividad del sistema inmunológico, lo que podría agravar estas condiciones (3).

Asimismo, aquellos con enfermedades hepáticas deben abstenerse de usarla, ya que podría afectar la función hepática (16). Además, se aconseja no administrar equinácea a niños menores de doce años por el riesgo de reacciones alérgicas (17).

La interacción de la equinácea con otros medicamentos es una consideración vital, por ejemplo, puede inhibir la enzima que metaboliza la cafeína, afectando su eliminación del cuerpo (18). También es importante no extender el tratamiento con equinácea por más de ocho semanas consecutivas, recomendando un descanso antes de retomar su uso (19).

Los efectos secundarios asociados con el consumo excesivo de equinácea incluyen náuseas, vómitos, mareos, diarreas y dolor de cabeza. Estos efectos son una señal para disminuir la dosis o cesar el consumo (20).

Cómo tomar la equinácea

Tomar equinácea. Foto por Envato.
Tomar equinácea. Foto por Envato.

Es fundamental consultar a un especialista antes de comenzar cualquier tratamiento con equinácea, dado que casi toda la planta es utilizable y se presenta en diversas formas como cápsulas, infusiones, extractos y cremas. En términos generales, no se deberían consumir más de cinco tazas de infusión de equinácea al día para el tratamiento de resfriados, ajustando la dosis según la evolución de los síntomas (21).

Preparación de la infusión de equinácea

Para preparar una infusión casera se necesitan agua, hojas o extracto de equinácea, y una olla. Se hierve el agua, se agregan las hojas o el extracto y tras unos minutos, se retira del fuego y se deja enfriar. La infusión se puede refrigerar y endulzar al gusto.

Adquisición de la equinácea

Se puede adquirir equinácea en herboristerías, tiendas especializadas o tiendas online, estas últimas ofrecen una amplia gama de opciones en cuanto a marcas, precios y calidad.

Referencias:

  1. Shah, S. A., Sander, S., White, C. M., Rinaldi, M., & Coleman, C. I. (2007). Evaluation of echinacea for the prevention and treatment of the common cold: a meta-analysis. The Lancet Infectious Diseases, 7(7), 473-480.
  2. Kindscher, K. (1989). Ethnobotany of purple coneflower (Echinacea purpurea, Asteraceae) and other Echinacea species. Economic Botany, 43(4), 498-507.
  3. Barnes, J., Anderson, L. A., & Gibbons, S., & Phillipson, J. D. (2005). Echinacea species (Echinacea angustifolia (DC.) Hell., Echinacea pallida (Nutt.) Nutt., Echinacea purpurea (L.) Moench): A review of their chemistry, pharmacology and clinical properties. Journal of Pharmacy and Pharmacology, 57(8), 929-954.
  4. McGregor, R. L. (1968). The taxonomy of the genus Echinacea (Compositae). The University of Kansas Science Bulletin, 48, 113-142.
  5. Binns, S. E., Hudson, J., Merali, S., & Arnason, J. T. (2002). Antiviral activity of characterized extracts from Echinacea spp. (Heliantheae/Asteraceae) against herpes simplex virus (HSV-I). Phytotherapy Research, 16(5), 452-456.
  6. Goel, V., Lovlin, R., Barton, R., Lyon, M. R., Bauer, R., Lee, T. D., & Basu, T. K. (2005). Efficacy of a standardized echinacea preparation (Echinacea purpurea juice) for the treatment of the common cold: a randomized, double-blind, placebo-controlled trial. Journal of Clinical Pharmacy and Therapeutics, 30(1), 17-25.
  7. Müller-Jakic, B., Breu, W., Pröbstle, A., Redl, K., Greger, H., & Bauer, R. (1994). In vitro inhibition of cyclooxygenase and 5-lipoxygenase by alkamides from Echinacea and Achillea species. Planta Medica, 60(1), 37-40.
  8. Birt, D. F., Widrlechner, M. P., Lalone, C. A., Wu, L., Bae, J., Solco, A. K., … & Kraus, G. A. (2008). Echinacea in infection. The American Journal of Clinical Nutrition, 87(2), 488S-492S.
  9. Dawid-Pać, R. (2013). Medicinal plants used in treatment of inflammatory skin diseases. Postepy Dermatologii i Alergologii, 30(3), 170–177.
  10. Lüdtke, R., & Wiesenauer, M. (1995). A multi-center study on the regenerative effects of Echinacea purpurea juice in comparison to placebo. Phytomedicine, 2(1), 17-26.
  11. Hu, C., & Kitts, D. D. (2000). Studies on the antioxidant activity of Echinacea root extract. Journal of Agricultural and Food Chemistry, 48(5), 1466–1472.
  12. Barrett, B. (2003). Medicinal properties of Echinacea: a critical review. Phytomedicine, 10(1), 66-86.
  13. Goel, V., Lovlin, R., Chang, C., Slama, J. V., Barton, R., Gahler, R., … & Basu, T. K. (2006). A proprietary extract from the echinacea plant (Echinacea purpurea) enhances systemic immune response during a common cold. Phytotherapy Research, 20(8), 687-695.
  14. Woelkart, K., Linde, K., & Bauer, R. (2008). Echinacea for preventing and treating the common cold. Planta Medica, 74(6), 633–637.
  15. Block, K. I., & Mead, M. N. (2003). Immune system effects of echinacea, ginseng, and astragalus: a review. Integrative Cancer Therapies, 2(3), 247–267.
  16. Matthias, A., Banbury, L., Bone, K. M., Leach, D. N., & Lehmann, R. P. (2007). Echinacea alkamide disposition and pharmacokinetics in humans after tablet ingestion. Life Sciences, 81(11), 875-882.
  17. Huntley, A. L., Thompson Coon, J., & Ernst, E. (2005). The safety of herbal medicinal products derived from Echinacea species: a systematic review. Drug Safety, 28(5), 387-400.
  18. Gorski, J. C., Huang, S. M., Pinto, A., Hamman, M. A., Hilligoss, J. K., Zaheer, N. A., … & Hall, S. D. (2004). The effect of echinacea (Echinacea purpurea root) on cytochrome P450 activity in vivo. Clinical Pharmacology & Therapeutics, 75(1), 89-100.
  19. Woelkart, K., Marth, E., & Suter, A. (2006). Review on Echinacea: The genus Echinacea. Current Pharmaceutical Design, 12(35), 4477-4487.
  20. Barrett, B., Vohmann, M., & Calabrese, C. (1999). Echinacea for upper respiratory infection. Journal of Family Practice, 48(8), 628-635.
  21. Bauer, R., & Wagner, H. (1991). Echinacea species as potential immunostimulatory drugs. In Economic and medicinal plant research (Vol. 5, pp. 253-321). Academic Press.
Equinácea. Foto por Envato.
Equinácea. Foto por Envato.

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Componentes físicos

La salud es importante y no sólo del lado interno, el lado estético o físico dice mucho de nosotros. Cuando una persona tiene problemas de acné se le recomienda utilizar la equinácea para disminuir ese problema. Además, para las personas que están a dieta se recomienda usar aceites que no tengan grasas, como es el caso del aceite de coco. Lo bueno de este producto natural es que también se puede utilizar como hidratante del cabello, uñas y cara. Especial para quienes les gusta cuidar su aspecto físico.

También podemos aprovechar los beneficios de la cúrcuma es que es antiflatulento y agiliza la digestión, lo cual nos envía con facilidad al baño. Esto nos beneficios para bajar de peso, además de ser antioxidante, lo que mejora el reflejo de la piel, características que nos encanta a todos.

Más allá del componente físico, los problemas diuréticos es importante solventarlos pronto para no desarrollar enfermedades de los riñones. Una de las propiedades del acai es que también es un diurético natural, el cual podemos aprovechar si sufrimos de este malestar.

Para fortalecer el sistema inmune, de tal manera que estimule el crecimiento del cabello y uñas, podemos consumir semillas de lino, estas son ricas en grasas saludables y antioxidantes. Y que por supuesto, nos ayuda a ir al baño con más facilidad.

Para personas hipertensas

Las personas que tienen problemas de hipertensión deben consumir todo aquello que relaje las articulaciones y músculos. Uno de los grandes beneficios de la equinácea es desinflamar las articulaciones. Como sabemos, el consumo de jengibre en infusión o té, ayuda a bajar de peso. Pero además, este tipo de bebidas relajan los músculos y nos hacen sentir más energéticos, lo que baja la hipertensión. Mira más sobre el jengibre: https://www.todoellas.com/cocina/jengibre/

Perder peso es el deseo de muchas personas, algunos recurren a tomar medicina natural que les ayude a agilizar el proceso. Es necesario en este caso, conocer las efectos secundarios de la garcinia cambogia, un producto que si bien es natural y no tiene peligros fuertes, no se recomienda consumir a personas con hipertensión, diabetes ni a mujeres embarazadas. Su consumo podría provocar moratones o inflamaciones.

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