El colesterol es un tipo de lípido o grasa que tiene una función esencial en nuestro cuerpo. Desempeña roles vitales en la formación de las fibras nerviosas, en la composición de las paredes celulares, en la producción de ciertos ácidos y en el equilibrio hormonal (1).
Existen dos tipos de colesterol: el HDL y el LDL. El colesterol HDL, conocido comúnmente como colesterol bueno, contribuye a mantener un equilibrio saludable en nuestro organismo. En cambio, el colesterol LDL, denominado también como colesterol malo, debe ser controlado para prevenir su acumulación en exceso (2).
COLESTEROL HDL, CAUSAS Y SIGNIFICADO. Photo by mohamed_hassan. Pixabay.
Desde un punto de vista médico, es recomendable tener niveles altos de colesterol HDL y bajos de LDL para gozar de una buena salud. Si la situación se invierte, se hace necesario adoptar una dieta estricta para corregir esta condición (3).
Beneficios del Colesterol HDL
Entre los principales beneficios de las lipoproteínas de alta densidad o HDL, destacan la prevención de enfermedades del corazón y accidentes cardiovasculares. En otras palabras, mantener niveles adecuados de HDL contribuye a mantener una buena salud en general (4).
La medicina moderna ve al colesterol HDL como una herramienta para controlar y eliminar el colesterol LDL. Este tipo de colesterol recoge el LDL y lo lleva al hígado, donde es procesado y eliminado del organismo (5).
¿Cómo Aumentar el Colesterol HDL?
Para incrementar los niveles de colesterol HDL en el organismo es recomendable:
- Incluir una rutina de ejercicio regular (6).
- Seguir una dieta saludable, con bajo contenido en grasas saturadas (7).
- Establecer un plan para perder peso en caso de ser necesario (8).
En cuanto a los suplementos dietéticos, la niacina o vitamina B3 es la más efectiva para elevar los niveles de HDL. Sin embargo, su consumo debe ser supervisado por un profesional de la salud (9).
Es de vital importancia que todas las personas presten atención a los niveles de colesterol en su organismo y adopten las medidas necesarias para mantenerlos en equilibrio. La salud de nuestro corazón y nuestro bienestar general dependen en gran medida de este equilibrio (10).
Referencias
- Guyton, A. C., & Hall, J. E. (2011). Textbook of Medical Physiology. Elsevier.
- Fernandez, C., & Vega, G. L. (2016). LDL y HDL: “colesterol malo” y “colesterol bueno”. En G. L. Vega, C. Fernandez (Eds.), Colesterol: lo bueno y lo malo (2a ed., pp. 17-46). Elsevier.
- Harvard Health Publishing. (2018). ¿Por qué necesitamos colesterol?. En Harvard Medical School. Harvard Health Publishing.
- Gotto AM Jr, Pownall HJ. (2017). Manual of Lipid Disorders: Reducing the Risk for Coronary Heart Disease, 3rd Ed. Lippincott Williams & Wilkins.
- Gordon DJ, Probstfield JL, Garrison RJ, Neaton JD, Castelli WP, Knoke JD, Jacobs DR Jr, Bangdiwala S, Tyroler HA. (1989). High-density lipoprotein cholesterol and cardiovascular disease. Four prospective American studies. Circulation.
- Kraus WE, Houmard JA, Duscha BD, Knetzger KJ, Wharton MB, McCartney JS, Bales CW, Henes S, Samsa GP, Otvos JD, Kulkarni KR, Slentz CA. (2002). Effects of the amount and intensity of exercise on plasma lipoproteins. New England Journal of Medicine.
- Appel LJ, Moore TJ, Obarzanek E, Vollmer WM, Svetkey LP, Sacks FM, Bray GA, Vogt TM, Cutler JA, Windhauser MM, Lin PH, Karanja N. (1997). A clinical trial of the effects of dietary patterns on blood pressure. DASH Collaborative Research Group. New England Journal of Medicine.
- Varady KA, Bhutani S, Klempel MC, Kroeger CM. (2011). Comparison of effects of diet versus exercise weight loss regimens on LDL and HDL particle size in obese adults. Lipids in Health and Disease.
- Altschul R, Hoffer A, Stephen JD. (1955). Influence of nicotinic acid on serum cholesterol in man. Archives of Biochemistry and Biophysics.
- Thompson PD, Panza G, Zaleski A, Taylor B. (2016). Statin-Associated Side Effects. Journal of the American College of Cardiology.