Probablemente, todos tengamos la misma duda en relación a si la hierbabuena y menta son una misma planta, a pesar de ser llamadas por nombres diferentes. Y es que tanto la hierbabuena como la menta, son dos plantas de un mismo género, ya que la hierbabuena se conoce como mentha spicata, mientras que la menta es conocida como mentha piperita, perteneciendo a una misma familia de plantas herbáceas vivaces de las que existen muchas variedades.
Sin embargo y a pesar de la similitud entre las dos plantas de hierbabuena y menta, se hace interesante establecer las diferencias existentes entre ambas.
Hierbabuena y Menta. Foto por Envato.
Diferencias entre hierbabuena y menta
Al ser muy plantas muy parecidas, tenemos que buscar qué diferencia a la hierbabuena y menta para poderlas distinguir una de la otra, bien sea de manera visual o por sus propiedades y características, a manera de poder aplicar sus usos culinarios y medicinales apropiadamente.
La menta posee hojas más alargadas de un color verde mucho más intenso, mientras que la hierbabuena tiene unas hojas más redondas y rugosas, que permiten identificarla de una forma fácil.
Otra diferencia que existe entre ambas plantas, radica en que la menta tiene un olor más fresco y mucho más intenso y anisado que el de la hierbabuena (1).
propiedades de la Menta y la Hierbabuena
En su composición la hierbabuena posee vitaminas A, B2 y C, al igual que varios minerales como hierro, calcio y potasio, complementados por ácidos omega 3.
La menta es más rica en vitaminas del complejo B, pues contiene las B1, B2, B3, B5 y B6, sin dejar de mencionar que también nos aporta el betacaroteno, la biotina, el fósforo, calcio y potasio (2).
Si nos preguntamos qué las diferencia, vemos que la hierbabuena y menta poseen notables variantes en cuanto a su composición, donde claramente nos percatamos que la menta es más rica en vitaminas.
En relación a sus propiedades medicinales también conseguimos diferencias entre la hierbabuena y la menta.
La hierbabuena es calmante de los músculos del aparato digestivo aliviando cualquier trastorno a un mismo tiempo que disminuye los ardores digestivos, mientras que la menta es antiinflamatoria y es una excelente medicina para despejar las vías respiratorias, por lo que siempre es recomendable para tratamientos del asma (3).
También podemos establecer que la menta mejora la asimilación de los alimentos, mientas que la hierbabuena regula el tránsito intestinal.
Para finalizar, exponemos una nota importante entre estas dos plantas de la misma especie que no las diferencia, sino que las hace similares y es que ambas destruyen a la bacteria Helicobacter pylori (4).
Consumo de Menta y Hierbabuena
El consumo de hierbabuena y menta se extiende más allá de sus reconocidas aplicaciones culinarias, abarcando también importantes usos terapéuticos. En la cocina, la hierbabuena se utiliza frecuentemente para añadir un sabor fresco a ensaladas, bebidas y platos principales. Por otro lado, la menta se destaca por su capacidad para refrescar y realzar el sabor de postres, tés y cócteles.
Desde el punto de vista medicinal, ambas hierbas son valoradas por sus propiedades digestivas. La hierbabuena, específicamente, se ha utilizado tradicionalmente para aliviar síntomas de indigestión y náuseas, mientras que la menta se ha recomendado para tratar dolores de cabeza y congestiones nasales gracias a su efecto refrescante y despejador (5).
En terapias alternativas, el aceite esencial de menta se aplica en aromaterapia para mejorar la concentración y aliviar el estrés, mientras que la hierbabuena se utiliza en infusión para suavizar dolores menstruales y mejorar el sueño.
La inclusión de estas hierbas en la dieta diaria no solo contribuye al enriquecimiento de los sabores en nuestra alimentación, sino que también puede ofrecer beneficios terapéuticos significativos, apoyando la gestión de diversos trastornos leves de salud.
Referencias:
- Singh, R., Shushni, M. A. M., & Belkheir, A. (2015). Antibacterial and antioxidant activities of Mentha piperita L. Arabian Journal of Chemistry, 8(3), 322-328.
- Goyal, R., Sharma, P. L., & Singh, M. (2017). Pharmacognostical study of Mentha spicata and its antioxidant properties. Journal of Pharmacognosy and Phytochemistry, 6(1), 45-49.
- McKay, D. L., & Blumberg, J. B. (2006). A review of the bioactivity and potential health benefits of peppermint tea (Mentha piperita L.). Phytotherapy Research, 20(8), 619-633.
- Boyanova, L., Gergova, G., Nikolov, R., Derejian, S., Lazarova, E., Katsarov, N., Mitov, I., & Krastev, Z. (2005). Activity of Bulgarian propolis against 94 Helicobacter pylori strains in vitro by agar-well diffusion, agar dilution and disc diffusion methods. Journal of Medical Microbiology, 54(5), 481-483.
- Kligler, B., & Chaudhary, S. (2007). Peppermint oil. American Family Physician, 75(7), 1027-1030.