La araña camello, es una araña que recibe el nombre científico de Solifugae, que básicamente significa huir del sol. Normalmente muchas arañas de esta familia son llamadas arañas camello, sin embargo, este genero de araña se encuentra conformada por más de 1000 especies, las cuales tienen distintas variaciones en su aspecto físico, pero comparten un mismo comportamiento, entre otras características generales.
Características físicas de la araña camello
A primera vista, esta araña se asemeja más a un escorpión; sin embargo, es catalogada como una araña. Su color tiende a ser amarillo claro, aunque este puede variar, dependiendo de la alimentación que tenga (1), por otra parte, cuenta con 2 pares de 5 patas, otorgándole una velocidad y capacidad de salto considerable.
Araña Camello. Foto por Openverse.
Normalmente estas arañas suelen medir entre 7 y 10 centímetros; y su cuerpo, se encuentra conformado por muchos bellos diminutos, con los cuales la araña determina su entorno, pues su visión es muy poco útil.
Tiene un cuerpo bastante alargado en comparación a otras arañas; además, este es flaco, sin tener ninguna bolsa de veneno.
Cabe mencionar, que dentro de las más de 1000 especies que existen, la mayoría comparten estas características, sin embargo, existen algunas arañas camello de mayor tamaño; aunque su coloración suele ser la misma, al igual que su número de patas.
Características generales de la araña camello
Aparte de su aspecto físico, la mayoría de las arañas pertenecientes a esta familia, comparten otras características, entre las que se pueden encontrar:
Alimentación
La araña camello es totalmente carnívora, lo que la lleva a alimentarse de insectos, tales como:
- Mosquitos.
- Lagartijas.
- Saltamontes.
- Moscas.
- Abejas.
- Avispas.
- Termitas.
- Entre otros.
Además, esta araña tiene la capacidad de comer ranas, roedores, pájaros, escorpiones, e incluso, a otras arañas (2). Con respecto a su procedimiento de alimentación, este es bastante peculiar, ya que con sus mandíbulas empieza a consumir su presa, mientras segrega sustancias que ayudan a descomponer la carne, para así poder consumir con mayor rapidez su presa.
Comportamiento
La araña camello tiene su pico de actividad durante las noches; incluso no es de extrañar que su nombre científico signifique «huir del sol» (3). Por otra parte, esta araña posee un metabolismo muy rápido, lo que la obliga a tener un estilo de vida errático; lo que la lleva a alimentarse constantemente, moverse de un lado para otro, entre otras cosas.
Esta araña además destaca por su increíble fuerza y dureza, que la hacen un alimento complicado para sus depredadores; por otra parte, puede alcanzar una velocidad de 16 kilómetros por hora, esto sin mencionar, que tiene la capacidad de escalar con mucha facilidad, haciendo que pueda llegar a casi cualquier lugar sin complicación alguna.
Con respecto a su duración, estas arañas rara vez superan el año de vida, e incluso, su promedio de vida se encuentra entre los 6 y 9 meses, aunque esto puede variar un poco, dependiendo de la especie en cuestión (4).
Hábitat
Es posible encontrar arañas camellos en:
- América.
- África.
- Asia.
Esto debido, a que es una familia de araña bastante adaptable; que puede vivir tanto en desiertos, como en bosques y praderas. Normalmente suele ocultarse en las rocas, árboles caídos y arbustos, aunque esto si puede variar, dependiendo del tipo de araña en cuestión (5).
¿Es la araña camello peligrosa para los seres humanos?
Aunque esta araña pueda parecer peligrosa a simple vista, la verdad es que no representa ningún problema serio para los seres humanos, pues su mordedura no es venenosa; aunque si puede causar un enorme dolor, acompañado de otros síntomas, tales como:
- Ganas de vomitar.
- Movimientos involuntarios.
- Sudoración excesiva.
- Entre otros.
Además, la herida se puede infectar con mucha facilidad, por lo que se recomienda tener mucho cuidado si se sufre una mordedura de esta araña.
Referencias:
- Punzo, F. (2005). The Biology of Camel-Spiders (Arachnida, Solifugae). Springer Science & Business Media.
- Cloudsley-Thompson, J. L. (1995). Adaptations of Arthropoda to Desert Environments. Springer Netherlands.
- Muma, M. H. (1967). “Scorpions, Whip Scorpions and Wind Scorpions of Arizona”. Arizona State University, Tempe: 29.
- Henschel, J. R., & Lubin, Y. D. (1997). “Environmental factors affecting the web and activity of a psammophilous lycosid spider in the Namib Desert”. Journal of Arid Environments, 37(1), 367-380.
- Newlands, G. (1978). “Ecology and distribution of Southern African solifuges”. Annals of the Transvaal Museum, 31(15), 499-552.