El ácido acético (CH3COOH) es un compuesto químico de gran utilidad y presencia en el mundo de hoy. Es una sustancia que se produce en cantidades tan elevadas como cinco millones de toneladas por año(1). Ciertamente está clasificado como un ácido débil(2) pero, sin menoscabo de una clasificación tal, sigue siendo un ácido. Esta especificidad quiere decir que es imprescindible manejarlo con las debidas precauciones. Ya que implican muchos riesgos para la salud.
¿Qué es el ácido acético?
Química o técnicamente hablando, esta sustancia recibe dos denominaciones adicionales ácido metilcarboxílico y también, etanóico(3). De manera tal que llamarlo acético, obedece a que es la denominación más usual para identificarlo. De antaño, se ha producido a partir de la descomposición-fermentación de otras sustancias que se hace reaccionar con enzimas(4). Al día de hoy la industria dispone de procedimientos, maquinarias y técnicas más eficientes y productivas.
RIESGOS EN LA SALUD DEL ÁCIDO ACÉTICO. Photo by mohamed_hassan. Pixabay.
En estado líquido, es cristalino y viscoso; en estado sólido, denominado ácido acético glacial, es blancuzco y de apariencia vidriosa(3). Durante largo tiempo se ha producido mediante dos métodos básicos. El primero y más antiguo, por fermentación de una sustancia alcohólica, generada por bacterias de carácter aeróbico(4). El segundo, método predominante en el presente, por carbonilación de metanol: combinación de CO2 y un catalizador con base yodo/cobalto(5).
Es usual que cuando hablamos del ácido acético, pensamos en primer lugar, en su presentación doméstica: el vinagre. Este producto es efectivamente tal ácido pero, envasado en una dilución que oscila entre el 3% y el 5%(6). Esto hace posible que lo usemos como componente de nuestra alimentación. En contraste, en una solución con un grado de concentración mayor, representa un peligro para nuestra salud.
Riesgos en la salud del ácido acético
Necesitamos recalcar que si este ácido se encuentra en altas concentraciones, no debería ser manipulado con ligereza o descuido. El punto es más que evidente, en esa condición, es imperioso que sea manejado por personas con la preparación adecuada(6). A esta advertencia es obligatorio añadir, que siempre será de necesidad, la utilización de todo equipamiento que convenga.
El ácido acético concentrado, como cualquier ácido, es muy corrosivo. Si lo utilizas sin tomar las debidas precauciones, corres el riesgo de sufrir quemaduras que pudieran ser de gravedad. Las áreas sensibles a sus efectos son la piel y las mucosas(6). Asimismo, pudiera causarte daños permanentes en los ojos. Las quemaduras que ocasiona, muchas veces se manifiestan algún tiempo después de la exposición al ácido(6).
Efectos que puede ocasionar el ácido acético
Como acabamos de advertirte, siempre tienes que tener mucho cuidado cuando manipulas cualquier ácido, más todavía, si está concentrado. La ingestión accidental del ácido, te puede inducir un agudo dolor de garganta, puede provocarte igualmente, dolores estomacales y abdominales. Lo peor es que te genera vómitos y una fuerte sensación como si el esófago se te estuviera quemando. Puede llagar a causarte heridas severas e incluso, la muerte(6).
La inhalación prolongada de sus vapores concentrados te produce dolor a lo largo del tracto respiratorio: nariz, garganta y pulmones. Te genera una tos incontenible, similar a una reacción en cadena, igualmente, dificultades para respirar y probablemente, náuseas. Asimismo, si tu piel está expuesta al ácido por largo tiempo, te puede generar, como señalamos, quemaduras de diversa gravedad(6).
Prevenciones mínimas necesarias
Aquellos lugares en donde almacenes el ácido deberán estar bien ventilados. Así evitas que sus vapores se acumulen. Por otro lado, los envases contenedores del ácido, tienen que ser de acero inoxidable, en su defecto, de vidrio resistente(6). Si ocurriese un derramamiento del ácido acético, deberás atajarlo con diluciones alcalinas, este tipo de sustancia es su neutralizante habitual(7). Es importante que identifiques adecuadamente cada uno de sus envases.
Toda persona que trabaje directamente con el ácido acético en diluciones concentradas, debe tomar todas las medidas de precaución. Debe usar ropas protectoras apropiadas y portar los accesorios complementarios. Estos tienen la finalidad fundamental de proteger la cara y los ojos; además, deberá proteger otras áreas sensibles como las manos y los brazos(7).
Referencias:
- OECD (2004). “Acetic acid”. SIDS Initial Assessment Profile. UNEP Publications.
- McMurry, J. (2011). Organic Chemistry (8th ed.). Brooks/Cole.
- Jones, R. (2005). Chemistry of the Elements (2nd ed.). Oxford: Butterworth-Heinemann.
- Purves, D.; Sadava, D.; Orians, G.; Heller, C. (2004). Life: The Science of Biology (7th ed.). Sunderland, MA: Sinauer.
- Holbrook, J. T.; Parker, C. A.; Gallagher, J. S. (1974). “Acetic Acid”. Organic Syntheses. Collective.
- Haynes, W. M. (2011). CRC Handbook of Chemistry and Physics (92nd ed.). CRC Press.
- Centers for Disease Control and Prevention (CDC). (2008). “Acetic Acid”. NIOSH Pocket Guide to Chemical Hazards. U.S. Department of Health & Human Services.