La condición en la que el cuerpo padece de una baja de ácido fólico podría originar enfermedades en el organismo. Debido a que es una de las vitaminas que mejor rol juega en el bienestar del cuerpo. Cuando existe una falla en la obtención de esta sustancia, es probable padecer síntomas. Y son estos síntomas de la falta de ácido fólico los que deben ser atendidos (1).
Principales síntomas de la falta de ácido fólico
Dentro de la gran cantidad de síntomas que puede padecer un organismo, siempre se deben estar atento a ellos. Sobre todo porque pueden ser la causa de una enfermedad mucho más seria. Para lograr determinar si existe una deficiencia de folatos es necesario llevar a cabo ciertos exámenes. Los cuales serán los que arrojen los resultados más acertados (2).
Falta de ácido fólico. Photo by carlos aranda. Unsplash.
Entre los síntomas más comunes que encontramos con deficiencia de ácido fólico. Principalmente se encuentran los mareos y el dolor de cabeza. Puede haber presencia de palidez externa, en el rostro. Así como una lengua muy roja, incluso con cierta brillantez. La persona se puede sentir muy cansada y con facilidad puede padecer de mareos (3).
Se pueden presentar diarreas sin causa alguna, y al realizar los exámenes niveles altos de homocisteina. Lo cual es un factor de riesgo en enfermedades cardiacas (4). Adicional a los exámenes de sangre es preciso tomar consulta con un especialista. El cual, a través de la revisión física podrá diagnosticar si existe una deficiencia. Determinando exactamente a cuál enfermedad nos enfrentamos.
Síntomas de la falta de esta vitamina ¿Deficiencia de ácido fólico?
Una de las causas principales de niveles bajos de ácido fólico es por las fallas en la alimentación. En donde se suprime el consumo de alimentos esenciales que porten este tipo de vitamina. Es preciso que estos alimentos se encuentren sumamente frescos y que además no sean sobre cocinados.
Aquellas personas que sufren de alcoholismo, es una causa. Podemos encontrar enfermedades de mala absorción en el intestino, como la enfermedad celiaca. La cual no permite que se logren absorber las vitaminas y minerales adecuadamente (5).
Adicionalmente, el ácido fólico al entrar en contacto con ciertos medicamentos. No es posible que el organismo lo absorba adecuadamente. Es común con medicamentos anticonvulsivos y anticonceptivos (6).
Situaciones en las cuales el ácido fólico es fundamental
Una de las situaciones fundamentales es en el periodo de gestación en la mujer, debido a que el ácido fólico es esencial. Sobre todo para evitar defectos congénitos en el feto. Se ha comprobado que disminuye considerablemente la aparición del labio leporino o la espina bífida. Por lo que el consumo, incluso antes del embarazo es primordial (7).
Durante el periodo de lactancia igualmente es fundamental el consumo de esta vitamina. Así mismo en el periodo de la infancia, cuando el organismo amerita de esta sustancia para su crecimiento y desarrollo. En casos de enfermedades como el cáncer de colon. Al realizar hemodiálisis y en el uso de ciertos medicamentos como el metotrexato.
Factores de riesgo para padecer de falta de ácido fólico
Ciertas condiciones propician que el organismo padezca de una falta de ácido fólico. Y más importante, cuando este no está siendo consumido ni en suplementos y mucho menos en alimentación. Los casos son cuando una mujer está embarazada o está dando lactancia. Durante este periodo se pierden muchos nutrientes y es necesario reponerlos.
En los casos de enfermedades hepáticas, en el alcoholismo y en casos de anemias crónicas. Aquellos pacientes que deben realizarse diálisis renales, deben consumir mayores cantidades de ácido fólico. Personas con altos niveles de hemocisteína en la sangre. Y finalmente, en enfermedades de mala absorción intestinal. Como la enfermedad de Crohn y la enfermedad celiaca.
Referencias:
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- Ross, A. C., Manson, J. E., Abrams, S. A., Aloia, J. F., Brannon, P. M., Clinton, S. K., … & Shapses, S. A. (2011). The 2011 report on dietary reference intakes for calcium and vitamin D from the Institute of Medicine: what clinicians need to know. Journal of Clinical Endocrinology & Metabolism, 96(1), 53-58.
- Green, R., Allen, L. H., Bjørke-Monsen, A. L., Brito, A., Guéant, J. L., Miller, J. W., … & Ueland, P. M. (2017). Vitamin B12 deficiency. Nature Reviews Disease Primers, 3, 17040.
- Refsum, H., Nurk, E., Smith, A. D., Ueland, P. M., Gjesdal, C. G., Bjelland, I., … & Vollset, S. E. (2006). The Hordaland Homocysteine Study: a community-based study of homocysteine, its determinants, and associations with disease. Journal of Nutrition, 136(6), 1731S-1740S.
- Ludvigsson, J. F., Bai, J. C., Biagi, F., Card, T. R., Ciacci, C., Ciclitira, P. J., … & Kaukinen, K. (2014). Diagnosis and management of adult coeliac disease: guidelines from the British Society of Gastroenterology. Gut, 63(8), 1210-1228.
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- Czeizel, A. E., & Dudas, I. (1992). Prevention of the first occurrence of neural-tube defects by periconceptional vitamin supplementation. New England Journal of Medicine, 327(26), 1832-1835.